Su mal estado de salud preocupó a uno de sus familiares, que le recomendó consumir gorgojos chinos para curarse. Doña Pilar no lo pensó dos veces y empezó con el tratamiento acompañada de estos insectos. «Me encomendé a Dios y empecé a probar los gorgojos chinos durante las noches en ayunas por un año. El resultado fue como un milagro, empecé a comer con normalidad e incluso los médicos vieron mi caso con incredulidad porque asumían que ya debía estar enterrada», cuenta con asombro. Vayamos a los estudios científicos. Hasta ahora los beneficios curativos de este insecto no están comprobados por la ciencia, pero cada vez hay más adeptos e interesados que deciden probar el tratamiento alternativo ante las recomendaciones y buenos resultados. «El primer día comes uno, el segundo dos y así sucesivamente hasta el día setenta. A partir de allí la ingesta disminuye. Recomiendo hacerlo antes de dormir o en ayunas, porque en ese momento los gorgojos cicatrizan heridas y comen todo lo podrido en el estómago. Las personas sin enfermedades diagnosticadas no deben consumirlos», detalla. Pilar tiene seis hijos, de los cuales solo vive con Pablo, de 23 años, quien no puede continuar con estudios superiores por la situación económica en la que viven y se dedicó a ser chofer con un auto alquilado. «Mis demás hijos e hijas viven con sus propias familias. Son un poco ingratos, pero con la única que tengo más comunicación es con Evelyn que en Estados Unidos. Le he dicho que me lleve, pero aún no se ha podido», cuenta con tristeza. Una caja de pandora La señora Winkelried, apellido de origen suizo como nos relata, también tiene otra pasión que es la confección. Hace dos años comenzó a estudiar esta actividad en un Centro Técnico Productivo (Cetpro) en Chosica, donde conoció a un grupo de chicas con las que busca iniciar un nuevo emprendimiento a mediano plazo. Además, gracias a la intervención de Saberes Productivos de Pensión 65, dictó clases de tejido por un mes en la I. E. Mercedes Cabanillas, donde afirma que percibió una satisfacción única cuando los estudiantes la llamaban profesora. Y es que Doña Pilar a sus 71 años es incansable, luchadora, valiente y todo lo hace siempre con una sonrisa en el rostro porque tiene a Dios de su lado, como ella misma asegura. Tratamiento alternativo Doña Pilar tiene a sus gorgojos chinos en dos tinas de plástico cubiertas con tela tul y secadores de cocina ajustados con pasadores para que no vuelen y tampoco se acerquen las polillas. Según cuenta, se aparean y en máximo cuatro días se reproducen. Les da de comer pan y corteza de la cáscara de plátano. «Los quiero mucho porque me salvaron la vida», asegura. Una vez fue al mercado de la zona para regalar los gorgojos y ayudar a personas con enfermedades, pero no tuvo éxito porque muchos vecinos desconfían y tienen miedo de comer estos insectos. Incluso su hijo Pablo le dice que no piensa ingerirlos por temor a que le vaya a hacer daño. «Así como mi prima que me regaló los gorgojitos, yo también intenté hacer lo mismo; fui al mercado y empecé a recomendar, pero algunos lo comen por unos días y no continúan, mientras que otras personas simplemente no desean comerlos y esa decisión se respeta», comenta. Pensión 65 en Lima Provincias Pensión 65 a 23,712 personas adultas mayores en los 128 distritos de Lima Provincias. En la provincia de Huarochirí se beneficia a 1,954 adultos mayores. En la comunidad de Huayaringa, su cobertura alcanza a 23 personas adultas mayores. El programa enfoca sus esfuerzos en llegar a los adultos mayores de las zonas más alejadas del Perú. En la actualidad, cuenta con 1,028 puntos de pago a escala nacional. (FIN) NDP/LZD También en Andina: El Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, en alianza con el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, capacitan a comuneros de Apurímac, Arequipa, Puno y San Martín para que desarrollen sus ideas de negocio y generen su propio empleo. https://t.co/j87xLZ3emR pic.twitter.com/wmMM80y4wH
— Agencia Andina (@Agencia_Andina) November 12, 2022 Publicado: 12/11/2022